12 Jun ECO: Domingo 18 de junio de 2023
Evangelio Mateo 9, 36,10.8:
Al contemplar aquel gran gentío, Jesús sintió compasión, porque estaban decaídos y desanimados, como ovejas sin pastor. Y dijo a sus discípulos: «La cosecha es abundante, pero los trabajadores son pocos. Rueguen, pues, al dueño de la cosecha que envíe trabajadores a recoger su cosecha.»
Jesús llamó a sus doce discípulos y les dio poder sobre los malos espíritus para expulsarlos y para curar toda clase de enfermedades y dolencias. Estos son los nombres de los doce apóstoles: primero Simón, llamado Pedro, y su hermano Andrés; Santiago, hijo de Zebedeo, y su hermano Juan; Felipe y Bartolomé; Tomás y Mateo, el recaudador de impuestos; Santiago, el hijo de Alfeo, y Tadeo; Simón, el cananeo y Judas Iscariote, el que lo traicionaría. A estos Doce Jesús los envió a misionar, con las instrucciones siguientes: «No vayan a tierras de paganos, ni entren en pueblos de samaritanos. Diríjanse más bien a las ovejas perdidas del pueblo de Israel. A lo largo del camino proclamen: ¡El Reino de los Cielos está ahora cerca! Sanen enfermos, resuciten muertos, limpien leprosos y echen los demonios. Ustedes lo recibieron sin pagar, denlo sin cobrar. No lleven oro, plata o monedas en el cinturón. Nada de provisiones para el viaje, o vestidos de repuesto; no lleven bastón ni sandalias, porque el que trabaja se merece el alimento.
Comentario:
LOS NUEVOS APÓSTOLES DE HOY
Hace muchos años, una gran mujer catalana, María Antonia Paris, sintió el llamado de Dios a fundar una congregación nueva en Cuba, acompañada por San Antonio Maria Claret. La reflexión de este evangelio me lleva a evocar ese acontecimiento, porque Jesús en su tiempo vio la necesidad de su pueblo, así como estos dos grandes apóstoles se dieron cuenta de las necesidades de Cuba: evangelización, renovar la Iglesia, responder de un modo innovador a las situaciones que vivían los habitantes del lugar.
No podemos quedarnos en el pasado. Te invito a mirar a tu alrededor, el aquí y el ahora, mira la realidad donde te encuentras, y pregúntate: ¿necesitamos nuevos apóstoles hoy? Yo te digo que sí, urgentemente, se necesitan jóvenes, hombres, mujeres, adultos, profesionales, de toda raza, lengua, nación con un corazón abierto, al llamado de Jesús: ….VENGAN, VEN TÚ… Mateo, Luis, María,… Él te llama por tu nombre. ¿Sabías que tu nombre significa y tiene una misión?
No has venido por casualidad, sino por causalidad, no estás aquí por coincidencia sino, por diosidencia… tienes, tengo, tenemos un propósito en el mundo y la única manera de realizarlo es haciendo una pausa, abriendo el oído a lo que Jesús te dice: Ven y sígueme, cuento contigo para hacer de este mundo un lugar feliz, pacifico, justo… ¿quieres aceptar el reto?
Si te gusta lo extremo te recomiendo conocer a Jesús, conociéndolo lo amas y amándole le sigues. Nada más extremo que ir a ver y quedarse con Él. Esta experiencia es única, singular… nadie, absolutamente nadie, puede vivirla por ti.
Ven y síguele, sírvele, sé parte de este proyecto de una Iglesia en salida.
María Gilma Gómez