15 Feb ECO: domingo 18 de febrero de 2024
PRIMER DOMINGO DE CUARESMA
Evangelio de Marcos: 1, 12-15:
“A continuación, el Espíritu lo empujó al desierto. Se quedó en el desierto cuarenta días, siendo tentado por Satanás; vivía con las fieras y los ángeles lo servían. Después de que Juan fue entregado, Jesús se marchó a Galilea a proclamar el Evangelio de Dios; decía: «Se ha cumplido el tiempo y está cerca el reino de Dios. Convertíos y creed en el Evangelio»”.
Comentario:
“CONVERTÍOS Y CREED EN EL EVANGELIO”
Cada día, a través de los medios de comunicación, escuchamos las noticias desde diferentes puntos de vista sobre la realidad de nuestro mundo. La mayoría de las informaciones nos cuentan los sufrimientos provocados por distintos motivos: guerras, injusticias, violencia, hambre… y esto nos da tristeza. Sin embargo, cuando escuchamos o recibimos las buenas noticias sentimos alegría y gratitud en nosotros por las cosas buenas y tanto bien que también hay en el mundo.
Al empezar este primer domingo de cuaresma, la lectura del Evangelio nos recuerda que Jesús anuncia la Buena Noticia. Curiosamente, esta noticia es un llamamiento a la conversión: “convertíos y creed en el Evangelio”.
En el Evangelio se encuentran dos llamamientos a la conversión. El primer llamamiento viene de parte de Juan Bautista a preparar el camino para la llegada del Señor. Litúrgicamente este relato lo reflexionamos en el tiempo del adviento. El segundo llamamiento lo hace Jesús. Es el Señor mismo quien nos invita en este tiempo a la conversión y a creer en Él y su Palabra.
“Convertíos y creed en el Evangelio”, parece que esta frase se presenta como una advertencia fuerte, pero si miramos más allá por quien lo pronuncia, vemos que es un llamamiento cariñoso a volver a Él, porque Él nos ama y quiere lo mejor para nosotros.
¡Esto sí que es nuestra Buena Noticia! que nos da la verdadera felicidad y la salvación. La conversión tiene que ser un gran deseo en nuestro seguimiento a Cristo, deseo que vaya poco a poco haciéndose realidad en nuestra vida de cada día.
Que este tiempo de cuaresma sea para nosotros un encuentro de amor y misericordia, tanto con Dios como con los hermanos.
Yuliana Bunga Sogen
Misionera Claretiana